Es tiempo de vendimia
Mientras escribimos este post o incluso mientras estás disfrutando de una copa de vino, viticultores de todas las regiones están trabajando en la ardua tarea de la vendimia. Sí, para que tú puedas disfrutar en tu bar favorito del placer del vino con denominación de origen, otros han tenido que cosechar hectáreas de viñedo durante largas jornadas en un trabajo que, a pesar de la tecnología, sigue siendo artesanía pura. Seguramente a ti te suenan las fiestas de la vendimia, pero hay mucho más detrás.
Marcar una fecha común de inicio de vendimia para todas las denominaciones de origen es imposible, cada zona de producción empieza en momentos distintos, pero sí podemos decir que septiembre es el mes de la vendimia por excelencia.
Mucha gente espera impaciente la llegada de esta época, entre otras cosas, por el importante impulso económico que supone para miles de trabajadores y para las propias regiones vinícolas. Durante semanas ven alterada su habitual tranquilidad por esta pequeña revolución que transforma el día a día de pueblos y comarcas enteras.
(En este momento hacemos un inciso para recordar que el campo y su labor sigue siendo una importante fuente de creación de empleo que las administraciones deberían promocionar y cuidar más. Siempre es un buen momento para reconocer y prestar atención al trabajo de nuestros agricultores. Lo que comemos -y el maravilloso vino de nuestro país- viene del campo. ¡Ni más ni menos!).
Unos vendimiarán de madrugada aprovechando las condiciones de la noche. Otros, de sol a sol, como hacían sus padres y sus abuelos. Da igual cuándo y cómo, en cada denominación de origen conocen bien el terreno que pisan y cómo se hace un buen vino. Las normas de cada DO están orientadas a conservar una forma de hacer las cosas, contrastada durante muchos años, siempre con la vista puesta en la calidad y con el objetivo de lograr la excelencia. Seguirlas será la clave para conseguirlo.
El momento de recoger la uva influye mucho en el resultado final. Los entendidos dicen que el vino se hace en el campo y no les falta razón. A pesar de los avances tecnológicos y del conocimiento que hoy en día se tiene sobre la evolución del viñedo, la incertidumbre siempre está ahí, porque el clima es determinante. La recogida, maceración, el prensado o el embotellado serán algunos de los procesos por los que pasará el vino antes de que podamos descorcharlo en nuestra casa y destapemos por fin el gran secreto: el vino de esta añada. Si es con DO, sabes que la calidad está asegurada.
El vino que disfrutaremos el año que viene es el resultado de una cadena de decisiones que comienzan en este mismo momento, en el de la vendimia, y tendremos que tener paciencia hasta que podamos por fin probarlo. Estamos seguros de que será excelente.
¡Buena vendimia a todos!