El actor Imanol Arias ha sido el vendimiador de honor del Pla I Llevant en la celebración de su en su vigésimo aniversario como denominación de origen. La DOP Pla i Llevant se ha sentido muy honrada al aceptar el actor, de gran prestigio profesional y personal, este papel honorífico en un acto que representa el inicio simbólico de la vendimia. En Imanol Arias se unen dos facetas, por un lado su larga trayectoria de éxito y prestigio como actor y, por otro lado, por su labor de bodeguero. Es bien conocida su actividad relacionada con el vino en la ficción, pero también desarrolla esta actividad en la vida real como bodeguero que tiene vinos en el mercado. En el acto en un emocionado discurso de amor al vino fue detallando muchas facetas diferentes de  lo que representa el vino para el mundo cultural en el que estamos inmersos.

La DOP Pla i Llevant por su lado sigue con su actividad creciente en los veinte años que lleva de trabajo. Está conformada por 14 bodegas, 60 viticultores que cultivan casi 500 hectáreas de viñedo dedicado tanto a variedades francesas como autóctonas. En el principio de su andadura los viticultores y vinicultores se inclinaron por las variedades internacionales porque les daban una mayor seguridad en el cultivo. Las variedades autóctonas no estaban suficientemente estudiadas y seleccionadas siendo muy dispares en sus resultados. En estos veinte años se han elaborado un gran conjunto de proyectos de investigación entre los profesionales del vino y la Universitat  de les Illes Balears que han conducido a un mayor conocimiento del comportamiento de las variedades autóctonas como callet, manto negro, gorgollassa, fogoneu y las blancas: prensal y giró ros. El resultado de estos trabajos conjuntos empieza a manifestarse con fuerza puesto que cada vez son más los vinos elaborados con las variedades autóctonas. De este modo se da satisfacción al mercado que demanda cada vez más especificidad en los vinos mallorquines.

Una vez realizado el acto simbólico del inicio ya ha comenzado la vendimia real. Uvas de la variedad chardonnay o moscatel ya van camino de los lagares para iniciar su fermentación y el cuidadoso proceso de transformar el mosto en vino.