• El matador se encerrará el próximo sábado día 15 con cuatro toros “de las ganaderías más encastadas” en la plaza de Cariñena (Zaragoza), a partir de las 18 horas

• Isiegas, de origen cariñense, rendirá así homenaje a su antiguo apoderado, Ignacio Zorita, con el fin solidario de apoyar a la Fundación San Blas que ayuda a las personas sin hogar

• El torero aragonés destaca que será una “jornada emotiva” en la que lo va a dar todo “con muchísima ilusión” para que el aficionado disfrute

• Las entradas están a la venta en el Ayuntamiento de Cariñena y en la web tauronavarra.es, donde también se puede colaborar con la fila cero

Un fin solidario y las raíces en el territorio han unido a la Denominación de Origen Cariñena y al torero Jorge Isiegas en una singular iniciativa. El matador protagonizará este sábado una corrida en la plaza de toros de Cariñena, como único espada y frente a cuatro astados, en memoria del que fue su apoderado, Ignacio Zorita, y a beneficio de la Fundación San Blas, dedicada a la inclusión de personas sin hogar en Aragón.

El festejo se celebrará el sábado 15 de junio a las 18 horas y las entradas ya están a la venta en el Ayuntamiento de Cariñena –y en la web www.tauronavarra.es, donde también se puede colaborar con la fila cero–. El Ayuntamiento también colabora en esta iniciativa, así como la bodega Grandes Vinos. Jorge Isiegas explica la historia de este reto, el papel de la D.O. Cariñena y su aprecio por los Vinos que Nacen de las Piedras,. lema de esta denominación

PREGUNTA.- ¿Cómo surgió la idea de un gran desafío como es una corrida de toros en solitario?

RESPUESTA.- La verdad que es un proyecto que ha surgido desde el corazón porque sirve para homenajear a la figura de Ignacio Zorita, que fue mi apoderado, no solo quien me dio la oportunidad de ser torero, sino un referente humano y profesional. Ha sido uno de los últimos románticos del toreo y una persona muy querida en todo el mundo taurino y sobre todo en Aragón; y creo que no se le había hecho el homenaje que se merece.

Dedicarle una encerrona era hace unos meses solo una idea y una ilusión que se ha convertido en realidad gracias al trabajo desinteresado de muchísima gente, que me han ayudado muchísimo a organizar un festejo tan bonito como este, de la envergadura de una corrida de toros y que supondrá la vuelta a los festejos mayores en Cariñena, con la ilusión que eso no nos hace a todos.

P.- ¿Y por qué ha elegido para celebrarlo la plaza de Cariñena?, ¿por sus orígenes familiares?

R.- Efectivamente, mi abuelo Octavio, que también fue torero, nació en Cariñena y toreó varias veces en su plaza. Luego, ya en su adolescencia, se vino a vivir a Zaragoza, pero toda mi familia por parte de padre, todos los Isiegas, descendemos de Cariñena. Así que le tengo un cariño especial por conocerla y porque pude torear su festival de novilleros y siempre me han tratado muy bien.

Además tengo buena relación con el banderillero Jesús Arruga, que la plaza lleva su nombre, y se lo comenté en su día y le pareció buena idea. Después también tengo que agradecer a Sergio Ortiz, el alcalde, y a la Denominación de Origen la ilusión con la que también me han recibido. Por todo ello, me hace muchísima ilusión hacer este festejo y creo que el sitio ideal es Cariñena.

P.- Un rasgo muy distintivo de esta corrida es su fin solidario

R.- El festejo realmente no tendría el sentido que tiene si no fuese benéfico, precisamente por el ejemplo que me dio Ignacio. Le planteé desde el principio a su familia que eligieran el destino y fueron ellos los que propusieron a la Fundación San Blas, con quien él tenía mucha vinculación.

Me pareció genial. Creo que hacen una labor extraordinaria con la gente sin hogar en Aragón y creo que es algo muy bonito que todo lo que se recaude irá para ayudar a que personas que están durmiendo en la calle puedan salir adelante y encontrar casa y trabajo.

P.- ¿Cómo colabora la D.O. Cariñena en la organización y con este objetivo de la corrida?

R.- A la hora de organizar el festejo, hemos procurado ser muy transparentes en este aspecto. La Fundación San Blas recibirá directamente una parte del precio de cada entrada vendida, sea una o miles. El resto de este importe es para pagar los gastos de organización, que en un festejo como este son altos, pero luego todos los beneficios del espectáculo irán también para el trabajo de la fundación. Por esto hay que agradecer mucho la colaboración de la Denominación de Origen Cariñena, porque sobre todo ayudará a lograr este fin benéfico, que buscamos que sea el máximo posible. Siguiendo con su lema, también nos vamos a esforzar por sacar dinero de debajo de las piedras.

P.- ¿Personalmente cómo valora los vinos de la Denominación de Origen Cariñena?

R.- Aunque tengo que reconocer no soy un gran aficionado, desde luego conozco y he probado vinos buenísimos de Cariñena. Creo que todavía es un poco desconocido, pero que está en un ascenso muy importante y poco a poco se está situando para competir con otras grandes denominaciones, lo que es algo muy positivo. Tiene un potencial muy grande y dentro de no mucho tiempo lo vamos a ver.

P.- Volviendo a la corrida, ¿cómo animaría a los aficionados a acudir a Cariñena el 15 de junio?

R.- La presentación del cartel ya llenó el aula cultural de la plaza de toros de Zaragoza y mostró el interés que está tomando esta idea. Yo y todas las personas que están colaborando conmigo nos estamos esforzando al máximo porque sea un día bonito. La gente va a disfrutar los toros, porque hemos buscado las ganaderías más encastadas –Los Maños, José Vázquez, Valdefresno y Pedraza de Yeltes-, que lidian en todas las ferias de primera categoría, y hemos hecho el festejo pensando en el aficionado.

Yo como torero, no me voy a dejar nada para ofrecer la mejor imagen, porque también es cierto que, desgraciadamente, no toreo mucho y quiero que este día sirva también para dar un toque de atención. Y el homenaje a Ignacio, con la entrega en la plaza de una placa a su familia, va a ser una jornada emotiva.

P.- ¿Y cómo se prepara un reto tan exigente como es una corrida en solitario?

R.- Es difícil, porque es la primera corrida de la temporada. Pero como la ilusión mueve montañas se prepara con toda la ilusión del mundo, con los cinco sentidos, con el día a día, el entrenamiento, la mentalización… Estoy yendo a tentaderos, depurando cosas y tengo todas las ganas de que salga bien. De veras, creo que voy a dar una imagen muy buena y va a ser una tarde de toros con toda la seriedad que Cariñena, la gente de Aragón, la fundación San Blas y el toreo se merecen.